jueves, 26 de junio de 2014

El Reto Energético: Un Desafío para la Preservación de la Civilización Humana



En uno de sus escritos, Michio Kaku, físico teórico y futurólogo, evoca a Carl Sagan al argumentar que la evolución de las civilizaciones pasa por tres etapas o tipos.  La civilización Tipo 1 es aquella que tiene control absoluto sobre sus recursos naturales y el clima, y no depende del combustible fósil.  La civilización Tipo 2 se caracteriza por tener dominio de su sistema solar, incluyendo la colonización de sus planetas y de otros sistemas solares.  La civilización Tipo 3 es la más avanzada de todas, y tiene la capacidad de controlar galaxias enteras, incluyendo la explotación controlada de la energía contenida en los agujeros negros. 
Resulta entonces inevitable preguntarnos, ¿en qué etapa se encuentra actualmente la civilización humana del planeta Tierra? Pues es fácil coincidir con aquellos que aseguran que somos una civilización Tipo 0.  Y es que aún dependemos casi en su totalidad del petróleo y demás combustibles fósiles y no tenemos ningún tipo de control sobre los fenómenos atmosféricos.  Pero lo que hace a esto realmente inquietante es que algunos expertos aseguran que si una civilización Tipo 0 no evoluciona a Tipo 1, dentro de un tiempo determinado, está sentenciada a perecer.  De hecho, Kaku ha planteado que a nuestra civilización humana le quedan menos de 100 años para llegar al Tipo 1 y pueda evitar su desaparición.  La crisis energética mundial y las recientes discusiones sobre supuestas reformas energéticas en la Autorizad de Energía Eléctrica del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, parecen respaldarlo.  Existe la posibilidad de que nuestros días estén contados ante nuestra inhabilidad de implantar fuentes de energía alterna y renovable de forma efectiva.
La buena noticia es que aún estamos a tiempo.  La ciencia de hoy ya nos ha provisto las bases para la tecnología energética de la humanidad del futuro.  Somos capaces de producir energía a partir del viento, el sol, y el agua, e inclusive se experimenta con energía cuántica.  Entonces, ¿qué es lo que nos detiene y por qué seguimos sub-civilizados?  Son muchas las posibles respuestas a esta pregunta.  Pero desafortunadamente, en la mayoría de esas posibles respuestas, se destacan los intereses económicos por encima del bienestar de las futuras generaciones humanas.  Al menos nosotros, aquí en el archipiélago puertorriqueño y que disfrutamos de sol, agua y viento, podríamos llegar a un consenso, dar los primeros pasos, y servirle de ejemplo al resto del mundo.
Dr. Disdier


miércoles, 5 de febrero de 2014

Proyecciones para la matrícula escolar del sistema público en Puerto Rico

Cabe señalar que estos estimados están basados en un análisis de tendencias y no toman en consideración otras variables, que pudieran tener efecto a corto y largo plazo, como lo es por ejemplo variables demográficas y económicas.